Ciencia ficción pulp en el cine moderno: cuando lo viejo vuelve a molar
|Hoy queremos hablar de la ciencia ficción pulp y como ésta vuelve sin parar. Una estética y estilo que nació en las revistas baratas de los años 30 y 40, con portadas brillantes llenas de extraterrestres verdes, científicos locos y damiselas con trajes imposibles. Eran historias rápidas, exageradas, muchas veces absurdas… ¡pero con una imaginación sin límites!

Y ojo, porque esa estética sigue muy viva en el cine actual:
- Guardians of the Galaxy (2014–2023): James Gunn básicamente tomó un cómic menor de Marvel y lo transformó en una space opera pulp con naves que parecen chicles, mapaches parlantes y un árbol que solo sabe decir tres palabras.
- Thor: Ragnarok (2017): colores chillones, gladiadores espaciales y Jeff Goldblum vestido como si hubiera salido de la portada de Amazing Stories. Pura psicodelia pulp.
- Flash Gordon (1980): vale, no es “moderno”, pero sin su estética kitsch llena de rayos láser y villanos con capa, Taika Waititi no habría tenido tanto material retro para inspirarse.
- Star Wars (toda la saga): George Lucas siempre admitió que le robó sin vergüenza al pulp. Espadas láser, princesas rebeldes, contrabandistas galácticos… básicamente Buck Rogers con mejor presupuesto.


Lo fascinante es que aquello que en su momento se consideraba barato y descartable hoy se ha convertido en la gasolina creativa de Hollywood. El pulp demostró que la ciencia ficción no necesitaba ser seria para ser divertida, y esa irreverencia es lo que mantiene vivo el género.
Así que la próxima vez que veas a Chris Pratt bailando en el espacio o a un villano con casco ridículo amenazando la galaxia, recuerda: todo empezó en esas revistas baratas con papel que se deshacía en las manos.
Porque al final, lo pulp nunca muere. Solo espera a que lo redescubran con CGI…